El trading no es algo de la NASA, ni mucho menos para aquellos dotados de un CI extremadamente alto. Cualquier persona con voluntad de aprender puede hacer trading. Solo necesitas entender sus conceptos básicos, tipos de estrategias de trading, análisis técnico, algunos indicadores y mucha práctica. Como todo en la vida: la práctica lo es todo. La teoría es importante, ya que te marca el camino hacia donde tienes que ir para no perder el foco, pero como bien dice el dicho: la práctica hace al maestro.
En este artículo te explicaremos los conceptos más básicos del trading y la teoría que necesitas saber antes de empezar con tus primeras operaciones. Te guiaremos a través de ejemplos y recursos gratuitos para complementar tu conocimiento. Además, al final encontrarás cursos y una cuenta demo para que practiques tus primeros trades.
Como bien mencionamos anteriormente, cuando alguien dice que hace trading, es porque está comprando y vendiendo distintos instrumentos financieros. Los principales mercados en los que se puede hacer trading son:
Mercado o bolsa de valores: es el lugar donde se comercializan acciones de distintas empresas, que representa una parte de la propiedad de dicha compañía. Cuando compras acciones posees proporcionalmente una parte de ella. Las bolsas más conocidas son: NYSE, NASDAQ, AMEX
Mercado de divisas o forex: lugar donde se da el intercambio de distintas monedas extranjeras. Las divisas que más se negocian se llaman majors y en la lista están: USD (US dollar), EUR (euro), JPY (yen japonés), GPB (libra esterlina), AUD (dólar australiano), CAD (dólar canadiense) y CHF (franco suizo).
Mercados de commodities: espacio donde se negocian distintas materias primas que usan para la producción de productos, tanto de consumo primario como secundario. Por ejemplo: trigo, soja, café, cacao, cobre, plata, petróleo, entre otros.
Mercado de criptomonedas: sitio donde se comercializan los activos digitales desarrollados a partir de la tecnología blockchain y se caracterizan por tener una alta volatilidad. Tranquilo, te explicaremos a qué se refiere ese concepto. Las principales criptomonedas son: Bitcoin, Ethereum, Solana, Cardano, Dogecoin.
Mercado: lugar donde se reúne la gente para la compra y venta de productos. Es un lugar donde se realizan tratos comerciales. Como lo vimos anteriormente, existen distintos tipos de mercados financieros que se clasifican según el tipo de instrumento que se comercializa.
Liquidez: es la capacidad de convertir algo en efectivo rápidamente, sin afectar su precio de mercado. La liquidez describe qué tan rápido y fácil un activo puede comprarse o venderse en el mercado sin perder su valor intrínseco. Por ejemplo: el dinero es el activo más líquido del mundo. A fin de cuentas, cuando hablamos de liquidez nos referimos al dinero.
Volatilidad: se refiere a los cambios bruscos de precio que tiene un activo financiero. Un instrumento financiero es volátil cuando su precio oscila con mucha amplitud, es decir, sube y baja con mucha extensión. Los activos más volátiles son: los commodities y criptomonedas. Una mayor volatilidad se da principalmente por la cantidad de negociaciones, o sea, por la cuantía de oferta y demanda (compra y venta).
Apalancamiento: se refiere a que tú, como trader, dejas una garantía, un capital, permitiéndote tomar posiciones más grandes sin la necesidad de tener ese capital. Por ejemplo: si yo dejo una garantía de $10.000.000 CLP, pueda tomar una posición o hacer trading de $100.000.000 CLP. En resumen, te permite multiplicar tu dinero.
Spread: el spread es la diferencia que hay entre el precio de compra/venta que ofrece cada bróker con respecto al precio actual del activo financiero. Es la forma en que la mayoría de los brokers gana dinero. Hay algunos que te ofrecen spread más altos y otros más bajos, por esa razón, es importante que averigües bien los precios que te ofrece cada uno y optes por el que más te convenga. Tienes que tener en cuenta que el spread no es fijo, sino que varía. Conoce acá las razones por las cuales el spread varía de precio.
Órdenes: es cuando realizas una operación de compra o venta en algún activo financiero. Piénsalo como si estuviera en un restorán y quieres pedir un plato de comida, ordenas del menú y quieras el garzón, te lo lleva. En el trading es lo mismo, solo que en este caso lo haces de un instrumento financiero con tu bróker.
Te mostraremos los pros de hacer trading y lo consideres como una forma de invertir.
Accesibilidad: si tienes internet, puedes acceder a tu cuenta desde cualquier parte del mundo. Eso te permite aprovechar cualquier momento de volatilidad para entrar y salir de mercado.
Rapidez: es el tipo de inversión más rápida que existe. Literalmente en un solo clic, puedes comprar y vender tus activos financieros. Olvídate de esperar horas y días para que se procese tu transacción. Los traders viven en la nueva época, la de la tecnología y la IA.
Variedad en mercados: la gran mayoría de brokers que ofrecen trading como tipo de inversión, tienen disponibles una amplía variedad de mercados financieros, con muchos instrumentos financieros a elección. En Capitaria tenemos a tu disposición más de 500 activos financieros. Los puedes ver acá.
Bidireccionalidad: es uno de los principales y más destacados atributos del trading. No solo puedes comprar un instrumento financiero, sino que también puedes venderlo.
Apalancamiento: como dijimos antes, esto permite invertir más dinero del que realmente tienes, lo que puede aumentar considerablemente tus ganancias, como también tus pérdidas.
Son menos que las ventajas, por supuesto, pero es importante que las reconozcas antes de tomar la decisión de hacer trading.
Riesgo elevado: debido a la constante variación de precios que tienen los instrumentos financieros, puede que pierdas dinero al no comprar y vender en los momentos precisos. Te exige estar viendo el mercado de manera permanente. Toda variación de precio afectará tu trade.
Psicología: tu cabeza es tu principal enemigo. No caer en la esperanza de que el mercado va a ir a tu favor. Tener la mente fría y tomar decisiones rápidas. No esperar más de la cuenta, ya que eso te hará perder más dinero del que crees.
Antes de iniciarte en este tipo de inversión, es importante que conozcan sobre los tipos de estrategias que existen, en qué se diferencian y cuál es la que mejor se adapta a tu estilo y tolerancia al riesgo.
Day trading: consiste en abrir y cerrar operaciones dentro de un mismo día. Como bien lo dice su nombre, las órdenes no duran más de un día. Es una de las más usadas por los traders, ya que prefieren tomar utilidades antes de que cierre el mercado, para así evitar cualquier gap o salto de precio.
Temporalidad: 1 día.
Swing trading: a diferencia de la anterior, acá las operaciones duran más de un día, pudiendo extenderse por 1 semana. Acá el trader busca tomar utilidades dejando la orden abierta por varios días.
Temporalidad: 3 días, 5 días o semanas.
Position trading: se basa en tomar posiciones con un rango más de mediano plazo. El trader abre distintas operaciones dejándolas abiertas por meses. No es muy aconsejable, ya que estás muy expuesto a un salto de mercado.
Temporalidad: meses
Scalping trading: es un tipo de estrategia muy rápida. El trade abre y cierra operaciones en minutos. Implica mayores riesgos, más apalancamiento y es necesario disponer de mucho tiempo para entrar y salir rápido.
Temporalidad: minutos.
Estas 4 estrategias no son excluyentes, es decir, no tiene que tomar solo una para hacer trading, sino que son complementarias. Puedes elegir una según el tipo de activo, el análisis que haga o el tiempo que tengas para dedicarle a tus trades.
Crear tu cuenta en un bróker. Puedes hacerlo en Capitaria.
Definir tu perfil de riesgo.
Depositar tu capital para invertir.
Descargar la MT5, plataforma que te entregará el acceso a más de 500 instrumentos de inversión.
E-book de trading: descárgalo acá.
2 clases gratis de nuestro curso Introducción al trading: ver las clases acá.
Masterclass sobre mercados financieros con Roberto Bonifaz: ver las clases acá.
Newsletter semanal: suscríbete acá
Canal de YouTube: suscríbete al canal
Cuando haces trading lo único que importa es el precio. Lo importante es seguir las tendencias e ir siempre a favor de ellas, nunca en contra. Las principales ventajas son: el apalancamiento y la bidireccionalidad.